El desayuno es delicioso y muy variado, con opciones calientes que te llenarán de energía para el día. 🍳

Si no te importa caminar, el Museo Nacional de Bellas Artes está a solo 5 minutos andando. Es bueno que el hotel esté en el centro empresarial de la ciudad. Todo cubrió mis necesidades...

Hotel ordenado en un edificio bonito a pocos pasos de los principales lugares de interés, de un restaurante. Las habitaciones - funcionales, modernas con todas las comodidades y con una cama doble. Ubicación perfecta y buena, cerca del centro de la ciudad. El distrito Centro de Río de Janeiro merece atención.

Nos encantó nuestra estancia en este hotel. Es un lugar de lujo, con habitaciones muy limpias y cómodas camas. El personal fue extremadamente amable, y la ubicación cerca de la Iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria es perfecta. Nos encantó la tranquilidad de la zona.

Proximidad aeropuerto nacional Santos Dumont Buen servicio autobuses Traslado fácil en autobús entre aeropuerto nacional Santos Dumont y aeropuerto internacional Tom Jobim.

Nada es un hotel viejo y con pesimas instalaciones, y claramente es irrecomendable.

Desde la entrada, el mal trato al cliente, intalaciones pesimas, carisimo para el servicio que brindan. Un espanto.

Habitaciones con una cama doble y todos los servicios disponibles. ¡Además, hay un montón de comida fresca en las comidas! 🍽️

El ambiente de las habitaciones (limpieza, comodidad, etc.), la cordialidad de su personal

La conexión wi fi no era buena.

Es limpio, moderno y cómodo. El restaurante es muy bueno para la categoría de Hotel. El personal muy amable y colaborativo. El servicio de internet es gratis y de buena calidad en el cuarto y en los espacios comúnes. La ubicación bastante buena para negocios.

Pasamos 2 noches en Río de Janeiro y disfrutamos mucho. Una ubicación conveniente cerca de la Cinelandia. Las habitaciones eran amplias y funcionales, y las instalaciones excelentes. El personal fue amable, educado y siempre dispuesto a ayudar con cualquier solicitud.

El gimnasio y la habitación.

Es muy impersonal. No hay un trato personalizado por parte de los empleados.

La cercanía al lugar de trabajo y a principales avenidas del centro de Río de Janeiro.

Ubicación práctica cerca del aeropuerto. Habitación cómoda. Gimnasio y cuarto de planchado disponibles. Desayuno variado y restaurant con buena comida.

Nada que no me haya gustado.

Estábamos encantados de encontrar unas habitaciones de buen tamaño en este hotel de negocios. La habitación tenía un minibar, una caja fuerte personal y una zona de estar, y la cama era cómoda. El hotel estaba cerca de varios lugares de interés, un restaurante y la parada de autobús. Además, su ubicación en el centro de la ciudad era conveniente. Probamos la comida y estaba deliciosa, con una gran variedad de platos para elegir.

El personal es servicial y amable, las habitaciones son cómodas, los baños son espaciosos y los desayunos son deliciosos y frescos.